Las víctimas de las autoridades chinas ruegan no retransmitir los “Juegos Genocidas” de Pekín 2022

Una carta firmada por la asociación internacional Tibet Network y dirigida a los presidentes de las grandes corporaciones broadcast del mundo,- entre los que se encuentra José Manuel Pérez Tornero, presidente de RTVE -, ha sido el origen del posible cambio de planes que afectará a la retransmisión de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022. La carta acusa al Gobierno chino de ir en contra de los derechos humanos de algunas comunidades tradicionalmente segregadas por el Gobierno chino. Concretamente alude a tibetanos, la etnia uigur, hongkoneses, chinos, mongoles del sur, taiwaneses y un largo etcétera de comunidades e individuos afectados por las acciones de las autoridades chinas.
La intención de la misiva está clara: las comunidades afectadas anteriormente mencionadas apelan a los dirigentes de los retransmisores oficiales de las Olimpiadas para que cancelen sus planes de retransmisión. Si no lo hacen, la asociación asegura que serán cómplices de los planes chinos para “lavar” las acciones de este país en contra de estas comunidades. Se asegura que, al retransmitir los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022, se legitiman los abusos contra los derechos humanos y se promueven los juegos que ya se han ganado el sobrenombre de los “Juegos Genocidas”.
La carta asegura que, “al menos dos millones de musulmanes están siendo relocalizados en “campos de reeducación” siendo sometidos a torturas sistemáticas. La situación del Tíbet ocupado se ha deteriorado drásticamente y la organización Freedom House la ha nombrado como el lugar con menos libertad para los derechos civiles y políticos en 2021, aparte de Siria. En Hong Kong, donde la Ley de Seguridad Nacional ha impuesto unas medidas desproporcionadas, la libertad y la democracia están bajo ataque y los activistas están siendo borrados del mapa y encarcelados en masa. En los territorios interiores de China, la gente divergente con las autoridades chinas desaparece de forma rutinaria. Y ya son décadas las que viene durando la intimidación y el bullying que ejerce China sobre Taiwan”.
Después, alega que la mayor parte de los compromisarios a retransmitir los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022 han establecido promesas para promover y proteger los derechos humanos. Además, muchas de las compañías citadas en la carta son miembros del Forum por los Derechos Humanos de la Industria Televisiva. Por ello, argumenta que estos esfuerzos, que durante mucho tiempo y a través de grandes inversiones, se han llevado a cabo se verán comprometidos si deciden seguir con sus planes de retransmisión de estos Juegos de Pekín 2022. “Los compromisos en materia de derechos humanos no significan nada si no van la magnitud y la gravedad de las violaciones de los derechos humanos cometidas por China exigen una atención y una acción serias”, describe la misiva de Tibet Network.
La asociación también acusa al COI (Comité Olímpico Internacional) de levantar la mano ante los abusos en materia de derechos humanos de las autoridades chinas. Ya en 2008, cuando se celebraron los Juegos Olímpicos de Pekín, el COI prometió que tomaría medidas si los derechos humanos se veían comprometidos en ese país y aseguró que el deporte ayudaría a comprometer y promover la libertad política y civil en China. La carta asegura que no pasó y que, al contrario, “China recibió un pase libre para violar estos derechos y libertades de forma gratuita”. Human Rights Watch se ha dirigido al COI asegurando que la situación en China es peor en 2021 que en 2008. La petición de Tibet Network concluye con que “los juegos no saldrán adelante si hay una oposición global seria. Debemos aprender las lecciones de 2008”.
El listado de medios interpelados en la petición es el siguiente: ARD; BBC; Bell Media; CBC/Radio-Canada; Discovery; DR – TV2; Eurosport; ERT; France Televisions; Grupo Globo; HRT; MTVA; NBC Universal; NOS; Rogers Media; RTBF – VRT; RUV; RTVE; Seven Network; Sky; SABC – SuperSport; Yle; ZDF.